Cenicaña realizó el Primer Foro Mitigación y compensación de emisiones en el sector agroindustrial de la caña para enfrentar el cambio climático, quebusca propiciar un intercambio de conocimientos para avanzar de manera integral en la estructuración de una ruta hacia la descarbonización del sector.
Representantes de entidades y compañías líderes en Objetivos Basados en Ciencia (SBTi, por sus siglas en inglés), finanzas climáticas y mercados de carbono aceptaron la invitación del Centro de Investigación de la Caña de Azúcar, Cenicaña, para compartir sus experiencias, análisis y perspectivas sobre la mitigación y compensación de emisiones en las industrias.
Por su parte, el sector agroindustrial de la caña de azúcar, a través de Cenicaña, ofreció una mirada retrospectiva a las acciones del gremio para enfrentar la variabilidad climática y una visión prospectiva de cara a los compromisos del Estado colombiano de reducir un 51 % las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) al año 2030.
Cenicaña es un centro de investigación financiado por ingenios y cultivadores de caña de azúcar para contribuir al desarrollo sostenible del país a través de la innovación en esta agroindustria.
Este Primer Foro Mitigación y compensación de emisiones en el sector agroindustrial de la caña para enfrentar el cambio climático fue una oportunidad no sólo para ampliar los conocimientos alrededor del tema, sino para continuar articulando esfuerzos a escala sectorial y regional, que permitan avanzar de manera más rápida y segura en la construcción de un futuro de innovación, energía y posibilidades infinitas a partir del principal cultivo de la región: la caña de azúcar.
Innovación para mitigar el impacto de la variabilidad climática
Desde 2016 la agroindustria colombiana de la caña de azúcar mide la huella de carbono de la cadena productiva y de sus productos. En los últimos seis años, la agroindustria de la caña ha reducido significativamente su huella de carbono, evitando la emisión de 915,000 toneladas de CO2 equivalente.
Al analizar la huella de carbono de la agroindustria mostró el uso de combustibles fósiles en la maquinaria agrícola y de transporte como uno de los factores de mayor contribución a este indicador.
Precisamente, en la búsqueda de soluciones para reducir estas emisiones Cenicaña, con el apoyo de los ingenios, lidera una investigación que se basa en la inyección del bioetanol, elaborado a partir de la caña de azúcar, en motores turbo diésel.
El experimento comenzó en el 2019 y evidenció que el uso del kit de inyección de bioetanol disminuyó en estos motores el consumo de combustible en 7% y la huella de carbono en 14%.
Carlab: impulsado con bioetanol de caña + diésel es una apuesta por la descarbonización del sector que estará rodando por las vías de la región como parte de esa evaluación que nos permitirá medir el consumo de combustible, su desempeño ambiental y mantenibilidad de los equipos.
Desde 2005, la incorporación de bioetanol como oxigenante en la gasolina en Colombia ha posibilitado la disminución de 7.72 millones de toneladas de CO2 equivalentes. Esto equivale a la plantación de aproximadamente 60 millones de árboles.