Minimice los efectos de una posible sequía

El Centro de Investigación de la Caña de Azúcar, Cenicaña, ofrece algunas recomendaciones para tener en cuenta en las labores de riego, mecanización y fertilización en el cultivo de la caña de azúcar durante periodos prolongados de escasas lluvias.

Recomendaciones:

 

Para riego

Antes:

  • Planear la realización del riego del periodo seco.
  • Programar las labores de reparación y mantenimiento de la red de riego, incluidos el llenado de reservorios y la limpieza de canales de conducción.      
  • Acordar turnos de captación de aguas superficiales con los usuarios de la misma fuente de agua.
  • En suelos con alto contenido de balasto o fragmentos de roca y donde se tenga tubería con compuertas instalar mangueras de bajo costo con goteros o con perforaciones.     
  • En suertes en renovación realizar un trabajo de nivelación a precisión en dos pendientes.
  • En suelos que se agrietan regar con más frecuencia, de acuerdo con el balance hídrico, para evitar el agrietamiento excesivo. La lámina de agua rápidamente aprovechable (LARA) en estos suelos es menor y el balance hídrico se traduce en riegos más frecuentes.         

Durante:

  • Realizar el Control administrativo del riego.
  • Al utilizar el balance hídrico para la programación de los riegos, se debe tener en cuenta lo siguiente:
    • Durante la época seca hay que ser preciso con la aplicación de los riegos cuando el balance así lo demande.
    • No necesariamente se debe esperar a que la lámina de agua del suelo (LAS) esté en cero o próxima a cero para regar. En períodos secos prolongados, se debe iniciar el riego con anticipación para evitar déficit de agua en el cultivo.
  • Se recomienda ajustar los caudales a los sugeridos en las Tablas 1 y 2, para hacer un uso racional del agua, de acuerdo con la edad de la caña.
  • Si es viable económicamente, utilizar riego por aspersión para germinación, establecimiento del cultivo y cañas hasta cuatro meses. En casos extremos de sequía, el riego por aspersión se puede utilizar hasta los ocho meses. Donde no sea posible la aspersión, en el riego de germinación y en el primer riego después del aporque, guiar el agua y remover los obstáculos (terrones, piedras o malezas) a lo largo de los surcos.
  • En el riego por surcos conformar los entresurcos en forma de W o en su defecto, conformarlos en forma de trapecio de base amplia.
  • En casos extremos de baja disponibilidad de agua aplicar riegos corridos o de avance rápido; y si es posible aumentar la frecuencia.
  • En plantillas, especialmente en suelos de textura fina, utilizar riego por surco alterno, aumentando el caudal/surco en 1 l/s. En socas también se puede  regar por surco alterno si se usa caudal reducido.
  • Donde sea viable el riego con caudal reducido, colocar el agua calle de por medio y alternar las calles para el riego siguiente. 
  • En socas:
    • Realizar el primer riego a los 2.5 meses de edad.
    • Con encalle al 4 x 1, colocar el agua en dos de las cuatro calles sin residuos.
    • Con encalle al 2 x 1, colocar el agua en una de las dos calles sin residuos y alternar la calle para el siguiente riego.
  • Utilizar el riego por pulsos (3 a 4 pulsos) donde se cuente con tuberías o politubulares con compuertas.
  • Taponar los surcos al final para evitar pérdidas.
  • Reutilizar los excedentes de agua en el riego.
  • Distribuir los residuos de caña picados para conservar la humedad del suelo. 

 

Para las labores mecanizadas

Antes:

  • Utilizar el estudio detallado de suelos para identificar la profundidad de los perfiles de texturas livianas y establecer la profundidad óptima de laboreo, con la cual no se propicie la percolación del agua. Procurar hacer la roturación unos 10 cm por encima del perfil de textura liviana.
  • En condiciones extremas de sequía evaluar los riesgos de renovar, ya que la poca disponibilidad de agua para los riegos de establecimiento del cultivo podría afectar la germinación de la planta. Hacer coincidir el plan de siembra con la disponibilidad de agua para riegos o la época de la estación lluviosa.
  • Evaluar la distribución heterogénea de agregados. En una adecuada secuencia de labores se debe obtener una presencia de partículas de suelo de 10, 2, y 0.5 cm de diámetro promedio, en proporciones de peso similares.

Durante:

  • Evitar el laboreo intensivo del suelo durante las operaciones de renovación ya que un suelo demasiado mullido es susceptible a los procesos de erosión y degradación de la materia orgánica.
  • Tener presente que en suelos con bajo contenido de humedad los requerimientos de potencia de la maquinaria aumentan y, en consecuencia se incrementan los consumos de combustible.
  • En los periodos secos la compactación del suelo es menor durante la labor de cosecha. Esto permite aplazar la labor de roturación en las socas, uno o dos meses, para evitar altos consumos de agua con los primeros riegos.

 

Para la fertilización

Antes:

  • Una buena nutrición con potasio garantiza el uso eficiente del agua. Para ajustar la dosis de aplicación de potasio y nitrógeno se deben seguir las recomendaciones ofrecidas por el SEF .
  • Preferiblemente usar nitrato de amonio o solución UAN líquidacomo fuente nitrogenada.

Durante:

  • En plantillas y socas hacer coincidir uno de los riegos de establecimiento  con el de acompañamiento de la fertilización. Este riego debe ser liviano (lámina entre 20-30 mm)
  • Si la fertilización es mecanizada el riego se debe realizar después de la fertilización; pero si la fertilización es manual el riego se debe realizar antes de esta labor. La cercanía entre el riego y la fertilización es de suma importancia ya que se requiere de agua disponible en el suelo para que la fertilización sea eficiente.

 

Para el uso de maduradores

Antes:

  • Analizar cada suerte en la que se va a aplicar el madurador para seleccionar el producto y la dosis de acuerdo con la variedad, el número de corte, la producción estimada (aforos detallados), el tipo de suelo y la edad.
  • En lo posible, hacer un reconocimiento aéreo para tener una mejor percepción del desarrollo del cultivo y detectar franjas de suelo arenoso en donde sea contraproducente aplicar madurador (regulador de crecimiento) en condiciones de sequía.
  • Informar previamente a los jefes de zona y a los proveedores de la aplicación del madurador.
  • Utilizar los resultados de las evaluaciones precosecha para decidir la aplicación o cambio de madurador.
  • Realizar una estricta supervisión de la labor.

Durante:

  • Evitar la aplicación de maduradores en plantillas con menos de 11 meses de edad y en socas con menos de 10.5 meses. En casos excepcionales se toma como edad mínima de aplicación en socas los 10 meses de edad.
  • En el caso de maduradores alternativos la aplicación se hace alrededor de los 9.5 meses de edad del cultivo para permitirle mayor tiempo de acción al producto.
  • Disminuir las dosis de maduradores entre 20% y 40% de la calculada.
  • Usar mezclas de maduradores tradicionales con alternativos (bioestimulantes)
  • En áreas muy afectadas por la sequía, como piedemonte, en cañas jóvenes y con bajas producciones estimadas de caña, aplicar maduradores alternativos como foliares a base de fósforo y potasio.
  • Cosechar en un rango de 4 a 8 semanas después de la aplicación del madurador y con mayor frecuencia entre las semanas 5 y 6.
  • Supervisar la altura de corte de tal forma que se descogolle por el punto natural de quiebre o máximo dejando dos entrenudos adheridos al cogollo.

 

Mas información:

Contacto:
Programa de Agronomía
(57-602) 5246611 ext 5130
Cali, Colombia.

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